Comunicaciones personales

domingo, 22 de abril de 2007

¿Defraudar al Estado? Cuidado...

Estaba yo a punto de eliminar la entrada anterior, puesto que al día siguiente de escribirla me parecía más bien una pura pendejada, y yo normalmente soy de escribir con "más chicha". Pero un titular de El País de esta mañana le ha dado actualidad súbitamente, así que la voy a respetar.
El titular reza así: "Hacienda llama a declarar a los autores de operaciones sospechosas con billetes de 500 euros". Más adelante, el texto arranca con "Se acabó la impunidad" y aclara que por "operaciones sospechosas" se entienden aquéllas realizadas mediante una transacción de más de 1000 billetes de 500 euros: osea, 500000 euros. Por supuesto, esta frase es exagerada. En realidad no va a suceder nada, o prácticamente nada. ¿Por qué? Analicemos la cifra: ¿cuál es el mayor gasto que una persona o familia corriente puede llegar a hacer de una tacada? Lo sabe cualquiera: Una vivienda. Y es muy raro que una vivienda estándar supere los 500000 euros. Es decir, las operaciones sospechosas son aquellas que exceden el poder de gasto de una familia corriente: para alcanzarlas hay que irse a otras compras o a varias viviendas a la vez. Y en ese tipo de compras ya está implicada gente con mucha más influencia, a quien no es nada fácil de tocar: el político que recalifica terrenos, el notario que da fe de las transacciones, el propio banco que facilita los billetes, el promotor que maneja por paquetes de viviendas... y simplemente, es imposible de creer que se va a enviar a toda esa gente a la cárcel. ¿Os imagináis de repente una España en la que desaparecieran de escena de pronto el 80% de los concejales, el 99% de los promotores inmobiliarios (este 99% incluye parte del 80% anterior), el 100% de los notarios (cómo iba a molar, volver al trueque), y el 110% de los banqueros?
No, no lo creo.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio